Grampusitis ocultista

¿Recordáis al poco llorado Grampus?

Pues para aquellos que sí lo hagan, estoy aquejado del mismo mal: exceso de trabajo y obligaciones paralelas.

Es por esto por lo que llevo desaparecido cierto tiempo, que no desconectado, pues leo todo lo que me escribís en mi blog. Pero siempre me digo: «acabo esto y visito el blog» y después de «esto» viene «lo otro» y «lo de más allá» y, finalmente, pasa el día sin haber pasado por el blog.

Así que me he propuesto que todas las tardes de los lunes dedicaré un par de horitas a bloguear. Unas veces postearé y otras os visitaré dejando mis deliciosas perlas de sabiduría animal.

Comentarista plateado

Iago me nombró ayer comentarista plateado en su blog. ¡Qué bien, un poquito de autobombo!.

Pero esto no es para hacerme publicidad a mí mismo (que tampoco vendría mal), sino que con el nombramiento (léanse ustedes el comentario en cuestión) demuestra tener un gran sentido del humor y saber encajar mejor que el mentón de Rocky Balboa, cosa que no debe sorprender a nadie que le conozca.

Además, no vamos a romper nuestra mutua admiración por un «hazte allá esas pajas».

Bezos siseantes a Iago y a todos.

¡Prósperos 366 días!

Los Reyes Magos

Sí, 2008 tendrá 29 de febrero.

Quien quiera saber el porqué de los años bisiestos, que acuda la la Wikipedia, que no es eso lo que quería deciros.

Tan sólo pretendo expresaros mis mejores deseos para este año que comienza (y para todos los que sigan).

Pero para que no todo se quede en buenos deseos, quiero comunicaros que me he puesto manos a la obra (en sentido figurado, claro, que eso de la albañilería me da mucha grima), y he escrito una carta a los Reyes Magos con regalos para todos (me ha salido en dos fascículos, pero los Reyes, al ser también magos, no tendrán problemas).

Así que entre otras muchas cosas he pedido:

Inspiración y constancia para Galahan, para que triunfe en su nuevas tareas.

Templanza y un poco de amnesia para Prol, que pueda comenzar una nueva etapa sin rencores hacia los ejecutivos de tve.

Un millón de puntos Iberia para Las Ruvis, para que puedan ir y venir desde su media isla cada vez que quieran (y en clase business, con las piernas estiradas) o se acerque uno de esos huracanes traicioneros.

Una bolsa de viaje como la de Sport Billy para Tam, que con lo que viaja últimamente necesita llevar encima de todo sin que le ocupe espacio (y para la mudanza le vendrá genial).

Una semana entera para COV, para ella misma, que tenga tiempo de hacer todo eso que no puede por falta de tiempo… ¿una semana?… un mes entero, no vamos a racanear a estas alturas.

Una operación de miopía por láser para Miss Sinner, porque eso de no distinguir bien la Catedral de Sevilla es grave, muy grave (si no quiere operarse, un quiosquillo de la ONCE tampoco le vendría mal).

Un sindicato de guionistas unido, fuerte y solidario para Miss Julie. Si, en lugar de sindicato, se convierte en un lobby frente a los productores sin escrúpulos, mejor que mejor.

Dos brazos extras para Ruth, para que aproveche bien el tiempo (sé que esto terminará con mi pretensión de mantenerme al día con su blog, pero pido para ella no para mí).

Revalidar el título de campeón de los blogs de cine para Jos (y que saque provecho a los nuevos brazos de Ruth).

Un sistema de gas sin tarjetas, ni saldos, ni gaitas para Sirventés, que no quisiera que se helase esperando al técnico de la compañía.

Un manuscrito original de Chuck Palahniuk (¿se escribe así?) para Shysh, y una pistola de rayo disruptor para usar con sus nenes cuando le saquen de quicio.

Un «cum laude» en su proyecto para Lidia. Y un bidón de pharmaton complex (¿o era pharmatint?).

Un Max, o un Goya, o un Óscar o todos juntos para Noe (y que se los entregue todos Ismael Serrano).

Un trabajo de media jornada y mayores ingresos para Grampus (reconozco que ésto es tanto para él como para mí, para volver a deleitarme con sus terrores blogueros).

Una colección completa de gazapos, errores gramaticales y grafológicos y barbaridades lingüísticas para Negra Murguera (aunque creo que eso se llama una plaza de profesora de la ESO).

Un perrito guapo, atento, amable, inteligente, cariñoso, hacendoso, apasionado… (vamos, como yo, pero con cuatro patas y pelo) para Tristana. Y para la mecanógrafa lo mismo pero con dos patas y menos pelo.

Ración doble de intrepidez, audacia, valentía y paciencia (que le hará falta con el empijamado perenne) para Entropía.

Un exitazo para MIR, por Ángela, y que la fichen para la continuación de Urgencias con George Clooney.

Un expediente académico brillante para Carabiru y un proyecto de museo nada mas acabar la carrera.

Y por último, mucho cariño y afecto para la lista de especímenes en vías de extinción.

Si alguno desea algo más, que se dé prisa en pedirlo, que los Reyes están ya en camino.

Entrevista con una Víbora (y IV)

Tras esta corta pausa, volvemos en Corazón Bloguero con la única entrevista en exclusiva al personaje más desconocido del universo blogueril: La señora de Víbora.
Iago sonrió a la invitada y prosiguió –Nos habíamos quedado con sus hobbies, y sobre eso, creo que Cov tiene una pregunta que hacerle– y giró el sillón hacia su derecha indicando a la aludida que le cedía la palabra.
Comenta que le gusta la repostería, pero ¿qué me dice de la cocina?, ¿es el Víbora escrupuloso? ¿es un sibarita? ¿come cualquier cosa? ¿es agradecido?, háblenos de sus costumbres culinarias. -Las preguntas salieron atropelladamente de la boca de Cov, con prisas y cierto amargor en el tono.
Pues, aunque tiene algunas «peculiaridades» –y acompañó la palabra con un movimiento de cabeza indicando cierta ironía- y sus preferencias, en realidad soy yo más escrupulosa y delicada que él para la comida. Así que ciñéndome a mis gustos suelo acertar con los de él. Además, yo cocino de escándalo -y levantó la barbilla en un gesto de indudable orgullo- y él sabe apreciarlo. Pero no queda ahí la cosa, el Víbora cocina bastante bien y tiene platos que le salen muy buenos, quizás le gusten demasiado las especias, pero no lo hace mal y muchos fines de semana cocina él.
Como siempre ocurre en televisión, nos estamos quedando sin tiempo, así que una última pregunta que corre a cargo de Tristana.
Al oir su nombre, Tristana levantó las orejas, agitó el rabo con nerviosismo y elevó la cabeza mirando a la entrevistada.
Gua, guau, gua-guau, grrr-gú
La invitada dudó un instante- no sé si contestar, puede que ése sea un dato que el Víbora no quiera desvelar, pero… bueno, un dato sí puedo dar, aunque con pocos detalles -y se irguió completamente en el sillón-. Pues sí, tenemos viborillas correteando por la casa y… hasta ahí puedo leer.
La noticia causó un primer momento de silencio, pero en seguida, la agitación entre los entrevistadores fue una auténtica revolución, los comentarios y las preguntas se superponían unas a otras, provocando una algarabía ininteligible. La entrevistada parecía sonreir satisfecha con el revuelo causado con tal revelación, e Iago intentaba, profesional pero inútilmente, calmar el ambiente para que el espectador pudiese entender algo en aquel gallinero improvisado, hasta que una voz profunda, grave y serena se alzó sobre las demás:
¿Muerde usted?
Aprovechando la sorpresa de ésta nueva pregunta, Iago consiguió hacerse oir. Nuestro director, Grampus, parece tener una pregunta.
¿Muerde usted? -volvió a sonar la voz misteriosa de Grampus.
Pues sólo cuando es necesario -contestó divertida la invitada.
Sin dar oportunidad a nuevas preguntas, Iago se puso en pie y, andando hacia la entrevistada sin dejar de mirar a cámara dió por termiado el programa.
Hasta aquí este especial de Corazón Bloguero con la única entrevista a la que se someterá la señora de Víbora, una exclusiva de este programa por la que Madame Viborova no ha cobrado absolutamente nada, lo ha hecho de forma totalmente desinteresada y como favor muy especial a un grupo de amigos curiosos.
Así que muy buneas noches a todos los espectadores, y nos volveremos a ver cuando ustedes quieran en mi fantástico blog, que a pesar de estar semiabandonado, siempre pueden recrearse con los artículos ya publicados que destilan intelectualidad y literatura con cada palabra escrita. Bezos a todos, adiós.

Entrevista con una Víbora (III)

Otra vez aquí, con la exclusiva del año. La única entrevista a la señora de Víbora, sólo aquí, en Corazón Bloguero.
Iago se volvió hacia la invitada, a la que cada vez se la veía más relajada, y resumió: Nos habíamos quedado con la pregunta de Tam, como siempre directa al corazón. ¿Cuándo y dónde surgió el amor?
La entrevistada esbozó una sonrisa y mirando hacia Tamaruca y sus ojos escondidos tras la rubia melena de rizos ensortijados respondió: Pues fue una Semana Santa. Un Martes Santo en el que un grupo de amigos, en el que venía el Víbora, nos fuimos para ver la entrada de una hermandad en la que se forma una bulla increible. Para poder tener un buen sitio nos fuimos con unas tres horas de antelación y, en medio del gentío, el Víbora se destacó como un auténtico payaso. Utilizó el truco más viejo del mundo: Me hizo reir. Desde ese momento me di cuenta de que no estaría mal tenerlo cerca, que tenía cosillas aprovechables.
¿Qué tiene el Víbora que le saque de quicio? – la voz de Galahan surgió como de la nada mientras él no movía un músculo, como si formase parte del decorado.
Pues tiene algunas manías que me ponen negra. Lo primero y más fundamental es que ronca, mucho, muchísimo. Y cuando le insisto para que vaya al médico, el sinvergüenza me dice que él duerme estupendamente, que como el problema lo tengo yo, que vaya yo al médico. En eso no puedo con él. Hay noches que me tengo que ir a dormir al sofá para no escucharlo y que me deje dormir. Cada vez que sale el tema me pone de los nervios y termino llamándole egoista, insolidario y cosas peores. Pero, y esto es otra cosa con la que no puedo, si él no quiere, es imposible discutir con él. Tiene una habilidad pasmosa para escaparse de cualquier tema que no le interese. Se pone irónico y cínico y no se enfada, parece que tenga horchata en las venas y yo, con eso, me pongo peor aún. Y lo tercero, es que sabe ser de un borde y un chulo que tira de espaldas y cae fatal. Cuando le presento a alguien, hay veces que me da miedo su reacción, porque si empieza con la «chulería sureña» no se le puede llevar a ningún sitio, dan ganas de esconderlo en un agujero y no sacarlo a la luz. Se vuelve un auténtico sociópata. Ahora, como esté de buenas es un encanto bendito.
Parece que Ruth tiene una pregunta – y la cámara enfocó a Ruth en el momento que, con el índice derecho, empujaba las gafas para colocarlas en su sitio.

¿Qué ha hecho usted para merecerle?

La frente de la invitada se arrugó en un gesto de incomodidad – ¿Qué he hecho para merecerle? -el tono le salió algo duro, pero pronto volvió a dulcificarse, aunque el ceño permaneció levemente fruncido – ¿Y qué ha hecho él para merecerme a mí? No crean que es tan fácil convivir con alguien tan independiente que, a veces, llega a parecer autista. Si no fuese por mí, viviría encerrado en el nido como un ermitaño y moriría aplastado por una avalancha de papeles. Si por él fuese, su vida social se restringiría al trabajo.
Tratando de aliviar la tensión, Iago lanzó una nueva pregunta: ¿Se considera usted una mujer progre o una maruja?
Los labios de la invitada se endurecieron por un instante, pero un brillo asomó a sus ojos y la boca se relajó hasta formas una amplia sonrisa: No lo sé, díganmelo ustedes: Soy una mujer que trabaja desde los 18 años y, desde que me casé, además saco adelante mi casa y mi familia, cocino maravillosamente, y los sábados me pego un tute enorme para limpiar, lavar y planchar y jamás permitiría que nadie saliese de casa con una prenda arrugada o sin conjuntar. ¿Soy progre o maruja?.
Shysh requirió la atención de Iago y, decidido a volver al buen tono del principio, se atrevió con otra pregunta: ¿A qué dedica el tiempo libre? Si es que le queda.
La entrevistada volvió su mirada hacia Shyh, ahora sí mucho más relajada, y contestó: Pues alguno tengo, muy poco, pero alguno hay. Pues lo que más me gusta es la lectura, la repostería, tanto elaborarla como saborearla, y charlar con los amigos.
Bueno casi estamos terminando Iago interrumpió antes de que nadie hiciese una nueva pregunta- pero aún quedan las dos preguntas más importantes por hacer. Pero esto será después de un último corte publicitario. Les prometo que éste será muy cortito, apenas 30 segundos y volvemos a Corazón Bloguero.

Entrevista con una Víbora (II)

Buenas noches, hoy contamos con la mayor exclusiva del mundo blogueril. Tenemos con nosotros, y dispuesta a satisfacer toda nuestra curiosidad a la sra de Víbora. Sólo aquí, en Corazón Bloguero.

Iago paseó su vista sobre las tarjetas y, girando el sillón hacia su derecha, miró hacia el arco de colaboradores preparados como los atletas esperando el pistoletazo de salida. “Y las primeras preguntas corren a cargo de nuestro colaborador Shysh, cuando quieras” y con un gesto le dio pie para su entrada.
Shysh balanceó su sillón como novato en estas tareas, pero sólo se trataba de una posse bien estudiada para conectar con la invitada transmitiendo cierto nerviosismo común. Estoy encantado de ser el primero en romper el hielo, pero como el tiempo es muy limitado vamos directamente con el asunto: ¿Conoce usted la bitácora que lleva su marido y que ha sido el motivo de su salto a la fama en este mundillo?
Pues no – contestó la invitada directamente. No por estar ante tanta audiencia iba a hacer concesiones a la galería. Las cosas directas y sin paños calientes. Así era ella y así la iban a ver – Nunca me ha dicho nada de eso. La verdad es que El Víbora es tan independiente que muchas veces pienso, y se lo digo, que tengo la sensación de que vivo con un extraño.
Entonces, ¿no sabía que un montón de extraños querían saber cosas sobre usted? Miss Sinner no pudo reprimir un pequeño salto en el sillón para hacer su pregunta. Después de todo aquello no era un sesudo debate moderado, era Corazón Bloguero y se había levantado la veda.

Pues no, no lo sabía.

¿Y qué le parece? ¿tomará represalias contra el Víbora?

Pues que pregunten no me parece ni bien ni mal. Lo que sí me importa es lo que pueda responder él. Soy muy celosa de mi intimidad, no me gusta pregonar mis cosas y menos ante desconocidos, pero también él es así.
Tristana levantó las orejas y cambió de postura sobre el regazo de su secretaria como si se le hubiese ocurrido alguna pregunta. Eso o, simplemente, quería cambiar de postura.
¿Y habrá represalias? – insistió Miss Sinner ¿tendrá que exiliarse, cambiar de identidad, hacerse la cirugía? ¿Se lo toma usted mal?
Represalias no. Alguna palabrita sí tendremos por parecer “de la secreta”. Que le cuesta un mundo contarme “sus cosas”. Pero lo pero son esas tonterías con sus amigote, eso de “El Pucherito”, que con veinte años podía tener alguna gracia, pero ya que tienen casi cuarenta son chiquilladas que no les pegan. Y cirugía no va a necesitar – y en su rostro surgió una media sonrisa que hizo que dos hoyuelos burlones apareciesen en sus mejillas – pero un poco de peso sí podía perder, que está perdiendo el cuerpecito que tenía cuando lo conocí.

¿Y ánde lo conosió? la Ruvi-portavoz echó coquetamente hacia atrás su melena tras hacer la pregunta.

Pues lo conocí en Sevilla. Por mediación de unos amigos comunes coincidimos saliendo una noche por el centro.

Como diría perales, ¿de ande hes? ¿hen qué lugar senamoró de él?

Soy andaluza de nacimiento y sevillana de convencimiento. Llegué a Sevilla de pequeñita y desde entonces soy sevillana como si hubiese nacido allí, además soy una enamorada de Sevilla, su historia y sus tradiciones.

¿Y se enamoró en aquel momento? – el pelo de Tamaruca le caía por delante, como si la pregunta surgiese de una cascada de rizos rubios – ¿fue un flechazo?.

Pues no. El día que nos conocimos nos caímos mal. Pensé que era un poco chulo y creído, con aire de suficiencia. Y creo que yo tampoco le caí muy bien a él, según me confesó tiempo después, le parecí un poco pija – e hizo un mohín con la boca, un gesto que le quedó simpático e hizo dibujarse más de una sonrisa entre los presentes.

¿En qué momento supo que quería reptar toda la vida junto a Víbora?

Justo en ese momento interrumpió Iago: Buena pregunta la de Tamaruca, ¿cuándo y dónde surgió el amor?, pero me lo va a contestar a la vuelta de publicidad.

Entrevista con una Víbora (I)

Y hoy, en “Corazón Bloguero”, tenemos una exclusiva mundial. El personaje más perseguido por los paparazzi del universo bloguero. Por primera vez, ante todos ustedes, y sólo en este programa: Madame Viborova.

El presentador aparecía eufórico en la pantalla mientras se oían aplausos y vítores desde el público.

Madame Viborova sintió un empujón que la hizo dar un traspiés por el pasillo y se enfrentó a una luz cegadora casi sin tiempo para recobrar el equilibrio.
Sonrió mientras sus pupilas se ajustaban al cañón de luz que inundaba todo a su alrededor.
“Al menos, se va a ver perfectamente el bonito verde de mis ojos, porque las pupilas deben haber desaparecido” – pensó.

Cuando, al fin, pudo distinguir el mundo que la rodeaba, lo primero que advirtió es que la estruendosa aclamación provenía de no más de doce o quince energúmenos que gritaban, aplaudían y chillaban, como si la vida les fuese en ello, siguiendo las instrucciones de un señor que agitaba en alto un cartel en el que se leía: Ovación cerrada.

“Ya me extrañaba a mí tanto griterío sin venir a cuento” – pensó – “punto en contra de mi ego” – anotó mentalmente.

Ahora, a su derecha, pudo distinguir al presentador aplaudiendo y haciéndole muecas extrañas. Eso y la voz de la muchacha de los grandes auriculares susurrando a gritos (cosa que habría jurado imposible de hacer hasta ese momento):“A tu derecha, ve hacia tu derecha, deprisa y sin correr”.

“Deprisa y sin correr” – se dijo interiormente – “para alguien que susurra a gritos o grita susurrando debe ser fácil”.

Y se acercó al presentador ante el temor de que se le desencajase la mandíbula. Se acercó a él con su sonrisa deslumbrante, los ojos más verdes que nunca y moviendo su cuerpo de forma sinuosa y elegante. ¿Cómo una gata?. No, como una auténtica víbora de la mejor casta. “¿No quieren señora de Víbora?. Pues, hala, tomad víbora”.

El presentador le tendió la mano y, manteniendo el saludo, le simuló dos besos sin llegar a tocarla.

“Buenas noches Iago dijo con su voz suave y tranquilizadora. Y girando la cabeza hacia los periodistas dispuestos en semicírculo extendió el saludo, “y buenas noches a todos ustedes” realizando un gracioso giro con la cabeza levemente ladeada como señal de buen voluntad hacia ellos.

Tomó asiento en el sillón que le indicó Iago mientras éste se sentaba en el sillón central que dominaba todo el escenario. Se acomodó, cruzo la pierna derecha sobre la izquierda ajustando el lateral de la falda y esperó el devenir de los acontecimientos.

“Alea jacta est” – le vino a la cabeza, y seguidamente – “¡ea!, otra sentencia que me ha pegado el Viborilla de su letanía pedante”. Pero nunca habría venido más oportunamente.

“Por fín tenemos con nosotros a Madame Viborova, como la bautizó Cov – comenzó Iago, mirando de reojo una tarjetita que sostenía en su mano derecha – “y frente a ella, nuestros habituales entrevistadores con todas las preguntas que, durante tanto tiempo, han ido acumulando. Pero antes de hacerle la primera pregunta, 30 segundos y volvemos. No se retiren, son sólo un par de anuncios y podrán satisfacer su curiosidad sobre Madame Viborova. Recuerden, sólo aquí, en Corazón Bloguero”.

La "dezconzolada viuda" se suicida

Iaguito dice que está pensando si cerrar el blog y como no permite comentarle en las entradas, pues lo hago desde aquí (que sé que lo va a leer).
1.- Que te crees tú que con cerrar los comentarios me iba a callar. ¡Vas listo pezqueñín!
2.- A ti lo que te estresa es el ritmo de post que llevas y te obligas a llevar. Tómatelo con más calma y publica sólo cuando tengas algo que decir y tengas ganas de hacerlo. Lo de 2 ó 3 posts diarios es para aburrir a cualquiera.
3.- Si esperas que ruegue, gima y llore para que no lo abandones, ¡vas listo pezqueñín!.
4.- Lo tuyo es «culo veo, culo deseo» (anda, coño, me ha salido un chiste). Como Grampus desapareció, ahora tú quieres tu propia ruvicampaña. ¡Mira que eres caprichoso!
5.- …este mejor me lo salto, que ya nos conocemos (jo, otro chiste, hoy estoy en plan Iago).
6.- Sigues siendo un llorón. Sólo que ahora en lugar de llorar porque nadie te lee, vas por ahí con el cuento de que te puede la responsabilidad.
7.- Que sepas que si lo dejas, te echaré de menos, porque era un auténtico placer picarte y verte saltar rápidamente.
8.- Haz lo que quieras, que tampoco yo soy nadie para decirte lo que debas hacer. Pero atente a las consecuencias (en cuanto las ruvis se enteren, vas apañado).
9.- Espero que aunque cierres el blog (que en el fondo lo dudo mucho) sigas comentando en los ajenos.
10.- Por llegar a un número redondo, ¿me vas a dejar desapadrinado?.

Un regalo para Shysh

Este próximo sábado se nos casa Shysh, y tal y como le prometí, aquí tiene su regalo.
Hay muchas razones para casarse y muchas más para no hacerlo, pero de todas las preguntas, dudas y titubeos, sólo una cosa es la que hay que tener clara.

No se trata de si os quereis, pues es posible, tanto casarse sin amor, como amarse sin casarse. El amor es algo íntimo de la pareja y ellos sabrán si necesitan amor para casarse o amarse sin matrimonio.

No, la boda no es algo íntimo, no es un contrato privado entre dos personas en el que se acuerdan una serie de cosas. Para compartir no hace falta una boda, para ser pareja no hacen falta papeles.

Una boda es mucho más que dos personas. Es convocar a los demás, a la sociedad entera para hacerles saber que esa unión existe, que el compromiso que se adquiere va mucho más allá de la intimidad de dos personas, que afecta a todo el que esté alrededor, al mundo entero.

Casarse es hacer partícipes a todos de que la decisión que habeis tomado tiene vocación de perdurabilidad y esos acuerdos que tomais se hacen públicos, conocidos por los demás y que generarán derechos y obligaciones entre vosotros y con la sociedad.

Una boda no necesita adornos, ni tiene que ser clásica o tradicional (la vuestra, desde luego, no lo es), lo que sí tiene que ser es pública en sentido jurídico. Por el hecho de casaros contraeis unas obligaciones mutuas, pero también nosotros contraemos otras con vuestra unión. Así que hacedla a vuestra manera, como más os guste, que os salga fantástica y que lo disfruteis al máximo.

Como ya he dicho antes, no hace falta el amor para casarse, pero que sepais que si lo hay, es mucho mejor. Felicidades y que sea enhorabuena.

Por cierto, si además hay risas muchísimo mejor.

… Y tú, ¿Posteas o comentas?

Relacionado con aquel post del 2 de marzo, «Con la lengua fuera», me ha surgido una nueva duda en este maravilloso e incógnito (para mí) mundo de los blogs.
Hay blogueros que a cada uno de los comentarios que recibe procura responder, aunque sólo sea como señal de que lo ha leido y en agradecimiento. Esta tipología podríamos denominarla el «bloguero amoroso». Claro que la contrapartida es que dedica mucho tiempo a responder comentarios y suele publicar poco.
El segundo grupo sería el de los que sólo responden a ciertos comentarios que, por cualquier razón, les llama la atención. De estos «blogueros cuentagotas» se deduce que leen los comentarios, pues algunos reciben contestación. Esto obliga a menos, pues si en el momento de leer el comentario no se te ocurre respuesta, pues no contestas y punto.
El tercer grupo, sería el de los «blogueros bocina», esto es, aquellos que publican su post y nunca, o casi nunca, contestan a los comentarios, dando la sensación de que ni los leen. Ellos sueltan su «speech» y punto. Curiosamente, estos «blogueros bocina» suelen descolgarse con un mínimo de un post diario.
Por fín, el último grupo es el de los «blogueros superman» que van a post diario, responden a todos los comentarios y, encima, comentan en blogs ajenos (y no uno ni dos, sino quince o veinte).
Por supuesto que soy capaz de poner nombres en cada una de las categorías, pero como no tengo dedos para señalar y la punta de la cola la uso para hurgarme el hocico, que cada uno se incluya en la categoría que piense (y me lo diga, ¡porfa!).
P.D. La duda me surge, obviamente, porque pertenezco al primer grupo y, el poco tiempo que tengo para bloguear, lo dedico más a comentar y recomentar (aparte de mi consabida y admitida ausencia total de inspiración y absoluto odio por la transpiración)
ACTUALIZACIÓN
Por sugerencia del respetable, se incluyen dos nuevas categorías:
Bloguero Segura (idea de Galahan) Es el blogger que va por todos los demás blogs diciendo: «Hola, soy Tal, estupendo blog. Entra en el mio. Torrente 4». Y pone el mismo comment en todos lados. En su blog, escribe paridas (normalmente metafísica barata pero hay de todo) y contesta los comments más aduladores. Si son del sexo opuesto, mejor.
Bloguero Superman wannabe (Idea de Sirvientes) el que quiere ir a post diario, responder a todos y cada uno de los comentarios e ir haciendo comentarios por ahí pero que acaba posteando irregular, se le olvida de responder a algunos comentarios y se pasa semanas enteras desaparecido de los otros blogs porque al pobrecillo no le da el tiempo para más.